Cuando se habla de Parque Nacional, inmediatamente surge,
para quien escucha, la idea de belleza paisajística, y para quienes están
un poco más familiarizados con el concepto, posiblemente la idea incluya
la protección de la fauna y la flora.
El Parque Nacional Los Glaciares, es una conjunción de ambas cosas, pero
cuenta además con un recurso invalorable para las generaciones futuras.
A la imponente belleza de sus glaciares, se suma la protección de una
variada muestra de fauna autóctona, salvaje y libre. Es reducto del Huemul,
el ciervo andino que la ignorancia del hombre estuvo a punto de extinguir.
El agreste encanto de la estepa y la policromía de sus bosques ofrecen
un paisaje cambiante y único.
Pero la mayor importancia del Parque consiste en el agua…y cuando decimos
agua estamos diciendo que nuestros hielos representan uno de los mayores
reservorios de agua potable para cuando el planeta no cuente con este
recurso vital.
Quien visite el Parque Nacional Los Glaciares no debe esperar encontrar
grandes obras de infraestructura, ni tiendas ni hoteles; aquí la mayor
y mejor obra no ha sido realizada por hombre alguno, y eso... es justamente
lo que nos llena de orgullo a quienes trabajamos por y para la conservación
del área protegida. |